Abordaje Psiquiátrico del Trastorno de la Conducta Alimentaria (TCA)
Cuando el TCA ya está presente, no es solo un tema alimentario. Se trata de un problema complejo que involucra factores emocionales, conductuales y neuroquímicos. Por eso, el tratamiento psiquiátrico juega un papel fundamental en el proceso de recuperación.
Desde mi punto de vista, el abordaje psiquiátrico busca entender a cada paciente de forma integral, atendiendo tanto a su estado mental como a las dinámicas sociales y familiares que puedan influir en el trastorno.
El tratamiento del TCA es un camino que requiere tiempo y compromiso y no tienes que hacerlo solo. Estoy aquí para ofrecerte un espacio seguro donde acompañarte en cada paso y celebrar cada avance, por pequeño que sea.
El primer paso es hablar. Si quieres saber cómo será tu primera consulta conmigo, pincha aquí.
Un enfoque centrado en la persona, no en el trastorno
En la consulta, el objetivo no es solo «curar» el TCA, sino devolverte tu bienestar mental y emocional. Esto implica no solo reducir los síntomas, sino también ayudarte a recuperar una relación sana con el cuerpo, la comida y la vida.
Evaluación integral
En mi consulta abordo el TCA desde una perspectiva global, personalizada y con un enfoque que va más allá de los síntomas visibles.
Te explico cómo trabajo:
- El primer paso es conocerte a fondo. Realizo una evaluación psiquiátrica completa para entender:
- La presencia de posibles trastornos asociados, como ansiedad, depresión o trastornos de personalidad.
- Los factores que desencadenaron o mantienen el TCA.
- El impacto del trastorno en tu calidad de vida.
- Tus fortalezas que puedan potenciarse durante el tratamiento
Plan de Tratamiento Personalizado
Cada persona es única, y así debe ser su tratamiento.
Algunas de las intervenciones que suelo recomendar incluyen:
- Psicofármacos: Solo cuando es necesario y siempre bajo mi seguimiento riguroso. Ayudan a estabilizar el estado de ánimo y a mejorar la regulación emocional.
- Psicoterapia: Trabajamos juntos aspectos como la relación con la comida, la percepción corporal y las emociones subyacentes.
- Colaboración interdisciplinar: Cuando es necesario, coordino el tratamiento con nutricionistas y terapeutas familiares para ofrecerte un apoyo integral.